Cuando era pequeña pegué un buen estirón que se quedó en nada cuando me vino el período y dejé de crecer. Me quedé con este metro 59 que no vale para mucho y para colmo rodeada de una familia de altos.
De ahí que los chistes fáciles sobre la altura estuvieran a la orden del día, y uno de los que recuerdo con más gracias es el de una de mis tías que al casarme me decía que debía buscar en tiendas de vestido de comunión en vez de novias.
Si hubiese estado más delgada lo hubiese intentado, al fin y al cabo hoy en día hacen vestidos de comunión que parecen de boda y seguro hubiera sido más barato.
Esta broma me vino a la cabeza al prepararme la otra noche la ropa para el día siguiente.
Ya he comentado alguna vez que para el trabajo me dejo la ropa preparada la noche de antes, porque si tuviera que decidir por la mañana.... iría en pijama.
Vestido de PRIMARK
El cinturón es de una falda, pero lo aproveché
Pañuelo de ALCAMPO
Cazadora vaquera de STRADIVARIUS
Bolso de tela con print de jirafa de PROMOD
Los zapatos que también parecen de comunión son de MERKAL
Y para después del trabajo que me tocaba ir a rehabilitación en METRO, adiós a los tacones ( no me fío aún de mi equilibrio cuando hay gente alrededor)
El mismo vestido combinado con bambas de toda la vida
Que le encantan a uno de mis perros, el que veis en la foto oliéndolas
Son de TINO GONZALEZ
Gafas de sol de VOGUE
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