Pero al menos, hay 3 anécdotas divertidas. La primera de ella es que contagiamos a todo el grupo con esa raruna costumbre de las bodas en España de corear cada dos por tres mirando a los novios la frase " que se besen, que se besen..."
En este caso cobraba más importancia ya que los novios no son muy dados a muestras de cariño en público, por lo que nos encantaba incomodarles. Hasta tal punto, que finalmente accedían para que nos calláramos, aunque fuera de esta guisa:
Sí, ahí debajo están los novios
Uno de mis grandes defectos desde pequeña es que soy una " ÑONA", y un inofensivo animalito como éste...
Puede hacerme bajar la ladera de una montaña gritando y sin mirar ni dónde piso, muy inteligente por mi parte
Y la tercera anécdota, va dedicada a todos aquellos que se han burlado y reído de mí durante años por ser una niñata urbanita que no sobreviviría en el campo ni 10 minutos, pues aquí estoy, trabajando en el campo
Pues bien que se me dio cortar... este tipo de grano...que ahora no me acuerdo cómo se llama ( vale, soy una urbanita, lo admito...) Pero le puse muchas ganas.
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